martes, 8 de abril de 2008

S.O.S. por Ingrid Betancourt




S.O.S por Ingrid Betancourt.


Desde el País Vasco, donde por desgracia sabemos también lo que supone sufrir el terrorismo, quiero pedir un gesto de humanismo a quienes están alargando el sufrimiento de Ingrid Betancourt.





No hay ninguna idea, por muy buena que sea.

No hay ningún derecho, por muy legítimo que lo sea.

No hay ninguna justificación, por grande que sea el agravio sufrido.

No hay ninguna razón, para tratar de esa manera a un ser humano.

La situación de Ingrid Betancourt, raya lo infrahumano. Desposeída de libertad, enferma, sin esperanza después de más de 6 años...

¿Hasta dónde puede llegar la barbarie humana? Secuestros, torturas, asesinatos... ¿Cuanto odio puede acumular el hombre? ¿Cómo es posible que en situaciones semejantes no se habra paso un poco de humanidad?
¿Cuál es el motivo de este secuestro? ¿Qué tiene que ver el socialismo revolucionario, con el descenso al inframundo de estos secuestradores?

No quiero cerrar los ojos a la situación de Euskal Herria. Desde posiciones abertzales independentistas también decimos que no queremos más terror en nombre de Euskalherria. Que ¡ETA debe desaparecer!
Que no necesitamos para defender estas posiciones a nadie que mate, secuestre, chantajee, en nombre de no se sabe qué ideas políticas.
Que tampoco está justificada la tortura ni el tratamiento vejatorio por parte del Estado para obtener información.

Que deslegitiman todas sus ideas, con el uso de la violencia.

Todavía me pregunto cómo pudo ser capaz de asesinar a Miguel Angel Blanco su captor, después de tenerle tres días secuestrado... Cómo no fue capaz de rebelarse a la barbarie que suponía tal gesto. Cómo no pudo tener, como ser humano, la humanidad de "pasar" de ideas políticas, de revoluciones, y demás ideologías, y "ejecutar" con espantosa sangre fría a un semejante...
Teniendo, como tenía, en sus manos, cambiar la suerte de esa persona, que en otras circunstancias, podría haber sido incluso amigo suyo.

Cuando el hombre se aleja de Dios, todo, TODO, se puede llegar a justificar...

Y quiero terminar publicando una foto que me viene en la cabeza, cada vez que veo la de Ingrid Betancourt. La foto de Ortega Lara al ser liberado, que fue confinado en un agujero por año y medio.

¡Nunca más!, por favor, en nombre de nada ni nadie.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola;
Desde Madrid, porque aquí vivimos y trabajamos - o al revés, nunca se sabe - pero con el espíritu en Cádiz que es donde nací, y que explica mi ansia continua por buscar el mar -que no la playa-
La libertad del océano, la libertad del aire en la cara, la libertad de gritar, hablar y expresar lo que cada uno siente en un momento determinado, o en todos los momentos de su vida...No hay derecho, estoy con Ioseba.
No hay nada que justifique, explique y ratifique la crueldad por la crueldad; el daño por el daño, el mal que se ejerce a un semejante - el ser humano- porque recordemos, los animales no se humillan de esta manera; ellos dañan por supervivencia...si es que dañan.
Lo peor de todo esto, bajo mi humilde opinión, es que probablemente todos los que militan al lado de los violentos, de los asesinos, de los terroristas; no saben porqué lo hacen.
La información les ha llegado tan deterioriada, tan distorsionada y tan camuflada...que no son capaces de distinguir la realidad de lo que no lo es, lo único que recaban en odio.
La falta de rigor histórico en la consecución de los hechos, la falta de buenos comunicados y comunicantes, la falta de educación y la falta de los gobiernos por intentar hacer todo ésto de una manera lógica -desde los colegios, la televisión, - hace que los jóvenes sean carne de cañón para estas ¿asociaicones? que hacen que sus militantes cargen en sus conciencias con muerte y tortura, en vez de con libros y muñecos....